Utilizando herramientas no invasivas como las cámaras trampa para estudiar, comprender y evaluar el comportamiento de los pumas y otras especies, la Fundación para la Conservación Cerro Guido ha puesto en marcha diferentes acciones que promueven la coexistencia entre la fauna autóctona, los ganaderos y la industria turística. La sostenibilidad, el acercamiento a la comunidad, la naturaleza, la cultura y la colaboración han sido definidos como conceptos clave para esta iniciativa.

A través de este estudio y del conocimiento de la fauna local, el proyecto pretende lograr una convivencia sana motivando cambios dentro de la industria ganadera y protegiendo a las ovejas con perros, con el fin de preservar los ciclos naturales de las especies que habitan este lugar.

En la actualidad, la Estancia Cerro Guido cuenta con unos 20 perros pastores Gran Pirineo y Maremma, que son las razas utilizadas en Europa para proteger al ganado de los ataques de los lobos. Sus ladridos ayudan a disuadir a los pumas de depredar más de 18 mil ovejas.

Los números de 2020, el primer año en que se implementó este sistema, muestran que la depredación de ovejas por pumas en la Estancia Cerro Guido fue de apenas el 1% del total de animales de la propiedad, una reducción significativa de las pérdidas, considerando que el promedio de pérdida de ovejas por ataques de pumas antes rondaba entre el 7% y el 10%.